martes, 9 de junio de 2009

Por hay esta en la WEB


Por el título, éste bien podría ser un post sobre destinos turísticos indispensables para un gay. San Francisco, Mikonos, Sitges, Chueca, el Morbo’s de Torremolinos… pero no. Más allá de todos estos paradisíacos lugares, quería hablar de las cosas (en general) que un gay debe hacer al menos una vez en su vida, como para un musulmán viajar a la Meca, vaya.
A la hora de hacer la lista pensé en incluir algunas prácticas sexuales indispensables (el 69, el trenecito, el helicóptero, la posición de la grulla roja en celo…), algunas películas indispensables (de la Streisand, de Bette Davis, de Gracita Morales…) o incluso algunos detalles absurdos indispensables como haber tenido un novio peluquero, maquillar a una chica… pero seamos sinceros, todas estas cosas casi todos las habemos hecho ya sin habérnoslo propuesto apenas (si no estamos ya cansados de ellas) y así la lista sería más bien de las 1001 mecas gay. Después de todas las cribas como si de un casting a un reality se tratara, estas creo que son las indispensables y únicas siete mecas gays:


Ir al Orgullo Gay. Aquí podríamos hablar de grados, ya que no es lo mismo ir al orgullo de Gandía, al de Valencia, al de Madrid o ya al de San Francisco, como tampoco es lo mismo verlo pasar desde fuera que desfilar o ir en la carroza de la Shangay con Alaska, Boris Izaguirre y la Terremoto. Indiferentemente a todo esto, uno no puede morir tranquilo sin ver todo ese derroche de colorines, de buenrrollismo, de libertad y de chulazos maravillosos sin camiseta.


Tintarse de rubio (más bien decolorarse que tintarse, pero bueno…). Uno no es gay de verdad hasta que no pueda decir que se ha tintado de un color escandaloso por lo menos. Años hace ya de la época aquella de GH1, cuando la moda eran las mechas y decolorados imposibles, aunque nunca es tarde si la mariconada es buena. Sin ir más lejos las pasadas fallas andó por Valencia un Eric mucho más rubia y tonta que de costumbre (porque yo lo valgo).


Tirarse a un chico de color (no tengo nada en contra de ellos, pero igual alguien se ofende si pongo negro, en fin...). Creo que es una de esas cosas que a todos se nos ha pasado por la cabeza alguna vez más allá de que nos gusten especialmente los chicos así. Yo lo conservo en mi lista de cosas pendientes, aunque no puedo morir sin probarlo. Por otro lado, cierto es que lo del negro no tiene por qué ser más que un grado. Seguro que a más de uno le encantaría continuar con el catálogo de Benetton y probar muchos mas colores...


Tirarse a un famoso. Si el famoso es de color ya matas dos pájaros de un tiro, aunque de color famosos y españoles más bien pocos… La fama siempre es un grado y nunca es lo mismo poder decir que te has tirado a la voz que anuncia la Droguería Mariví en la radio de tu pueblo que decir que te has tirado a Jesús Vázquez. Lo importante es tener en el currículum (o chorboagenda) un personaje reconocible más allá del cuarto oscuro (donde hay luz, claroestá).


Vestirse de mujer. Ya hablábamos en un post tiempo atrás que, en un gay, las probabilidades de travestirse en una fiesta eran directamente proporcionales a la cantidad de alcohol en sangre, la confianza con los invitados y la cantidad de maquillaje que sobrase del halloween/carnavales pasados, así que para superar todo eso y marcar un reto real habría que decir que no basta con vestirse de mujer: hay que vestirse de mujer y salir por ahí. Venga, va, diremos que aceptamos carnavales como fecha para hacerlo, pero muchos más puntos conlleva hacerlo en cualquier otro momento, la verdad.


Ir a un concierto de Madonna. Seguro que para mas de uno debería ser un concierto de Kylie, de la Streisand o de cualquier otra megadiva, pero me parece indiscutible que la verdadera reina es Madonna y no otra (y eso que no soy especialmente fan suyo), las cosas son así, que nada debe ser lo mismo después de eso...


Leer el Blog de Eric y Tom. Porque somos maravillosos, porque lo valemos y porque no se nos ocurría una séptima meca gay. Y que viva el autospam!
Y ahora dime, querido lector, crees que me he dejado alguna meca por poner? Y cuantas de estas cosas has hecho ya? Ansiosos andamos por leer tus comentarios al respecto

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